Las plumas estilográficas son una herramienta de escritura magnífica, considerada por muchos una de las mejores, tanto para su uso como para colección. Este instrumento único está asociado con la elegancia, la profesionalidad, la clase y el placer de escribir a mano.
Existe un amplio abanico de marcas y modelos muy variados, de dimensiones, tipos, formas, colores y precios diferentes entre las que elegir. En el mercado podrás encontrar desde plumas estilográficas baratas y accesibles, hasta ediciones limitadas y piezas de colección.
En Kalamazoo ponemos a tu disposición plumas estilográficas clásicas y modernas con la mejor relación calidad-precio, realizadas por fabricantes de reconocidas marcas como Parker, Pilot y Bic, así como cartuchos y tinta para plumas estilográficas en varios colores.
La pluma estilográfica, una herramienta de escritura única
Entre los principales usos de la pluma estilográfica está la firma de documentos importantes, ya sean acuerdos, contratos o certificados oficiales, debido a que su trazo confiere un valor sobresaliente, elegante y muy profesional.
Asimismo, las plumas también agregan un toque personal a cartas o postales escritas a mano, y no están reservadas exclusivamente para ocasiones importantes, sino que también son ideales para un uso diario en la oficina o en casa. Por otra parte, los artistas y aficionados o expertos de la caligrafía o el lettering las emplean con fines artísticos para crear obras e ilustraciones profesionales hechas con pluma.
En cuanto a los tipos de pluma, estos se diferencian en dos aspectos principales: la punta y el mecanismo de llenado de tinta. La punta, también conocida como plumín, suele estar elaborada de latón, acero inoxidable u oro, y puede tener varias formas, grosores, durezas y grados de flexibilidad.
En lo referente al mecanismo de llenado de las plumas estilográficas, el más popular y el que encontrarás en Kalamazoo es el de cartucho desechable, el cual es muy sencillo de usar ya que simplemente hay que desmontar la pluma y sustituir el cartucho vacío por uno nuevo. Esto ahorra tiempo y elimina la molestia de tener que rellenar manualmente la tinta, pudiendo haber escapes de tinta y manchas difíciles de limpiar.
También existen otras modalidades de llenado de tinta, como el sistema de émbolo, en el que debes introducir el plumín en el tintero y accionar el émbolo para succionar la tinta, a modo de pipeta. Tras llenar el depósito de tinta hay que limpiar con cuidado el plumín para evitar manchas.
La modalidad opuesta a esta última es la del sistema de pistón, en el cual el mecanismo es el contrario al émbolo. En vez de succionar, se ejerce presión sobre el pistón, lo que llena el cartucho de tinta.
Por último, nos encontramos con el sistema de leva, que funciona levantando una pequeña palanca incorporada en la pluma, introduciendo el plumín en la tinta y bajando la palanca para llenar el cartucho de la estilográfica. Estas últimas han quedado ya obsoletas, siendo el cartucho desechable la alternativa más comúnmente utilizada.
Por su parte, todas las plumas estilográficas utilizan un sistema de regulación de tinta para que esta fluya de manera constante sin necesidad de ejercer fuerza ni presión, consiguiendo un trazo suave y uniforme con un acabado profesional. Su tinta proporciona un color característicamente profundo y vivo, y el plumín permite realizar trabajos minuciosos y depurados con un estilo personal.
Tanto si eres un experto en caligrafía como si te estás iniciando en el arte de la escritura manual y te gustaría aprender más, las plumas estilográficas son un excelente comienzo.
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