Entre los distintos tipos de impresoras disponibles, las clásicas son las impresoras de inyección de tinta. A pesar de la existencia de las impresoras láser, las que funcionan mediante tinta pueden seguir siendo una opción totalmente válida para hogares u oficinas que no impriman a diario. El precio favorece a las impresoras de tinta, que incluso se están reinventando con las impresoras que prescinden de los cartuchos, pasándose al lado de los tanques de tinta.
¿Para quién es una impresora de tinta?
A pesar de que las impresoras láser son las más habituales en empresas, las impresoras de tinta siguen siendo útiles para según que usos. Este tipo de impresoras son las más adecuadas para entornos en los que su uso sea limitado, ya que de lo contrario, para un uso diario o más intenso las impresoras láser son más recomendables. Además las impresoras de tinta tienen un consumo energético menor y generan menos residuos que una impresora láser.
Las impresoras de tinta son además más idóneas para la impresión de fotos con calidad. No es un punto en el que tengan nada que envidiar a una impresora láser, de las que sí pueden envidiar la velocidad de impresión, habitualmente más alta. Si imprimes esporádicamente pero quieres que la impresión sea rápida, a la hora de elegir la impresora multifunción de inyección de tinta fíjate en la velocidad de impresión, siempre dividida entre impresión en blanco y negro (más rápida) e impresión en color (más lenta).
Las impresoras multifunción de tinta al estar pensadas habitualmente para hogares u oficinas pequeños, no suelen contar con un alimentador de hojas para el escaneo. Tenlo en cuenta, para elegir un modelo que sí cuente con ese alimentador, que facilita en gran medida el escaneo de varias hojas secuencialmente. De lo contrario, tendrías que escanear cada hoja una por una, dándoles la vuelta manualmente en caso de que quieras escanear ambas caras.
Entre las impresoras de tinta también hay diferencias. Algunos modelos tienen un cartucho de tinta y otro de color, mientras que otros cuentan con tres cartuchos de color por separado. Puede parecer mejor que tengan tres cartuchos de color, pero más allá del precio, las impresoras con un solo cartucho de color incorporan el cabezal en el cartucho, renovándose por tanto esta pieza en cada cambio de cartucho. Ese cambio no se produce en las impresoras con cartuchos de color por separado, por lo que en caso de obstrucción del cabezal es necesario reparar la impresora.
Impresoras de tinta sin cartuchos, la última novedad
Lo último en impresoras de tinta son las impresoras sin cartuchos. Parece imposible que una impresora de tinta prescinda del consumible de siempre, pero las impresoras Ecotank, Megatank o con otros nombres, que dependen del elegido por cada marca, incorporan un tanque de tinta que se puede recargar mediante botellas de tinta. Como si de un coche y su tanque de gasolina se tratase, pero con una impresora y tinta.
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